RECUERDOS CON SABOR A CARAMELO, SISEBUTA
"Educando a papá" (Bring up father), es una tira de prensa creada por George Mc Manus, que se publicó por primera vez en enero de 1913.
En Argentina fue publicada por el diario La Nación con el título "Pequeñas delicias de la vida conyugal", y más conocida por el nombre de sus protagonistas: Trifón y Sisebuta.
La tira desarrolla las peripecias de un inmigrante irlandés en EEUU, Trifón, de clase media quien se hace repentinamente millonario, pero no quiere abandonar a sus viejos amigos ni sus antiguas costumbres para consternación de su esposa, Sisebuta. Ella es una mujer engreída y neurótica,de carácter dominante con su pareja, una arribista social encantada con su nueva situación social. Trifón vive sometido a los caprcihos de su mujer que lo mantiene controlado y sometido.
Siempre viene a mi recuerdo esta singular caricatura porque era la preferida de mi papá. El solía comprar el diario La Nación todos los domingos y me leía las desventuras del pobre Trifón. Juntos nos reíamos del agrio carácter de Sisebuta y compadecíamos la suerte del desdichado marido.
Este es uno de los cálidos recuerdos que mantiene vivo a mi papá en mi corazón. Hace muchos años que ya no lo tengo a mi lado, pero su sonrisa y su eterno buen humor siempre me acompañarán.
En Argentina fue publicada por el diario La Nación con el título "Pequeñas delicias de la vida conyugal", y más conocida por el nombre de sus protagonistas: Trifón y Sisebuta.
La tira desarrolla las peripecias de un inmigrante irlandés en EEUU, Trifón, de clase media quien se hace repentinamente millonario, pero no quiere abandonar a sus viejos amigos ni sus antiguas costumbres para consternación de su esposa, Sisebuta. Ella es una mujer engreída y neurótica,de carácter dominante con su pareja, una arribista social encantada con su nueva situación social. Trifón vive sometido a los caprcihos de su mujer que lo mantiene controlado y sometido.
Siempre viene a mi recuerdo esta singular caricatura porque era la preferida de mi papá. El solía comprar el diario La Nación todos los domingos y me leía las desventuras del pobre Trifón. Juntos nos reíamos del agrio carácter de Sisebuta y compadecíamos la suerte del desdichado marido.
Este es uno de los cálidos recuerdos que mantiene vivo a mi papá en mi corazón. Hace muchos años que ya no lo tengo a mi lado, pero su sonrisa y su eterno buen humor siempre me acompañarán.
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